Alexander Herzen, hombre de principios, nos relata el doloroso momento en que su matrimonio se desmorona por el adulterio de ella con un poeta alemán que él había cobijado. Cuando, después de atravesar la etapa recriminatoria, empieza a recuperar la relación conyugal, una tragedia se lleva a su madre y a su hijo. El golpe anímico es tan fuerte que incide en la salud de su esposa, quien fallece al cabo de un tiempo.
"No, no de la reconciliación; ese término no es apropiado. Las palabras son como las prendas fabricadas en serie: le sientan bien «hasta cierto punto» a todas las personas de la misma talla y le cada mal a cada una de ellas" (p. 114)
Escrito desde las entrañas, este capítulo fue incorporado después de su muerte a la autobiografía titulada Pasado y pensamiento.
Lo que sucedió posterior a este episodio absolutamente personal nos los relató E.H. Carr en Los exiliados románticos, obra biográfica de la intelligentsia rusa (revolucionarios esparcidos por Europa), en el que la Historia se mezcla hábilmente con la anécdota, la cual, si cuento aquí, sería como un chisme.
Todo ello, más los trabajos de Isaiah Berlin, darían pie a Tom Stoppard a levantar La costa de la utopía, trilogía dramática en el que las ideas y el humor se mezclan y nos revelan una época de Europa.
Herzen, Alexander. Crónica de un drama familiar. Barcelona, Alba Editorial, pp. 181.