Mi vida junto a Pablo Neruda

Neruda íntimo. Para leerlo en paralelo a Los versos del Capitán e ir descubriendo su proceso creador. Sorprende cómo de un tirón podía elaborar un poema. Me hubiera gustado leerlos antes de conocer Isla Negra (2000) y La Chascona (2009).

Encontramos a Matilde y Pablo en Berlín, Bucarest, Ginebra, justo cuando van a decidir su futuro común. Las alegrías del amor clandestino dan paso a las dudas y remordimientos para luego consolidar a la pareja hasta la muerte del poeta (y diez años más, durante los cuales el golpe de Estado de 1973 se convertirá en el eje central de la historia).

Matilde Urrutia relata cómo se conocieron, pero no da más detalles comunes hasta el reencuentro europeo. Esa laguna hubiera mostrado otra faceta de Neruda, del Neruda íntimo (como la pintura que años más tarde Mario Vargas Llosa haría de él, comiendo de la fuente a dos cucharas).

Matilde ríe y canta. No es difícil imaginar por qué Neruda se enamoró de ella.

Urrutia, Matilde. Mi vida junto a Pablo Neruda. Seix Barral, Buenos Aires, 2002 (primera edición).

"Estamos aquí, solos, sintiendo toda la amargura del mundo. Salvador Allende asesinado, La Moneda incendiada, muy pronto por la televisión veríamos las llamas, el humo, la destrucción, y nos preguntábamos entonces: ¿Dónde estaban estos chilenos capaces de hacer todo esto? ¿Dónde estaban, que nosotros no sabíamos de su existencia?" (página 10)

 "Pablo empezó a encontrarle el lado divertido a este plan.

– A Picasso van a gustarle mucho mis confidencias –me decía, con esas chispitas que salían de sus ojos cuando inventaba una broma–. Va a reírse mucho cuando le cuente que mi amor es una huasa de Coihueco." (página 163)

Leído en Septiembre de 2010.