22 agosto 2021

El olvido que seremos

La mayor de las veces, las novelas sobre padres e hijos están marcadas por el distanciamiento emocional. Héctor Abad Faciolince consiguió la proeza de traducir a literatura el amor y la admiración sin ceder un ápice al sentimentalismo.

Pero no solo es la historia de la relación con su padre. También nos presenta a su madre (p.88-89) y sus hermanas. La historia de su familia se ubica en la convulsa Colombia de los años 70 y 80; específicamente en Medellín (¿es que acaso todo el último tercio del siglo XX sucedió en Antioquía?)

Ahí vemos al médico Héctor Abad Gómez, especialista en salud pública, catedrático de la Universidad de Antioquía. Para los conservadores era un radical y para la Izquierda extrema era demasiado tibio:  

"[...] cuando él más que nunca predicaba la tolerancia de todas las ideas, y el mesoísmo en filosofía (una palabra que él había inventado para defender el justo medio, el antidogmatismo y la negociación) repetía mucho la siguiente frase, quizá citando a alguien que no recuerdo: «Aquéllos a quienes los güelfos acusan de gibelinos, y los gibelinos acusan de güelfos, esos tienen la razón»." (p. 95).

Pero inclusive este hombre "«cristiano en religión, marxista en economía y liberal en política»" (p. 176) sucumbió al halago y permitió ser utilizado por impresentable partidarios del régimen de Corea del Norte (p.221).

La escena en que recoge de la morgue la ropa de su padre y cae del saco una de las balas, le revela que las autoridades no tenían mucho interés en averiguar lo ocurrido (p.225), pero, también, le muestra el poema de Borges que da título a la novela.

Esta es una de esas novelas que uno ansía ver en pantalla. Aun así, no es un libro fácil de convertir en imágenes y, tal vez, la película no está a la altura. En todo caso, ha sido un acierto que Javier Cámara encarne al padre. Uno tiene la sensación que ningún otro actor podría hacerlo ... tal vez por la calvicie.

Leído en diciembre 2020.

Abad Faciolince, Héctor. El olvido que seremos. Bogotá, Planeta S.A., 2006

No hay comentarios:

Publicar un comentario