22 octubre 2011

Los endemoniados



 “- Esto que propongo no es ninguna cobardía, sino el paraíso. ¡El paraíso terrenal! Puesto que no puede haber otro –concluyó Chigalioff, con autoridad” (p. 507; p. 506 y 526-527).

01 octubre 2011

Crónica de una muerte anunciada

De Gabriel García Márquez he leído sus CUENTOS Ojos de perro azul, Los funerales de la Mamá Grande (destacando éste, Un día de estos, En este pueblo no hay ladrones), La increíble y triste historia de la cándida Eréndida y de su abuela desalmada (destacando éste y El ahogado más hermoso del mundo); sus NOVELAS El coronel no tiene quien le escriba, Cien años de soledad, El amor en los tiempos del cólera, El general en su laberinto, Del amor y otros demonios, Memoria de mis putas tristes; sus REPORTAJES Relato de un náufrago, Cuando era feliz e indocumentado, De viaje por los países socialistas, Obra periodística (que la voy leyendo de a pocos y desordenádamente), La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile; sus textos AUTOBIOGRÁFICOS El olor de la guayaba, Vivir para contarla.



03 julio 2011

Las tres hermanas

Leí el drama antes de ir al teatro Británico (2011, primer semestre). Siempre escuché decir que en sus obras no sucede nada, y es cierto en tanto no hay guerra, asesinatos, misterios, sino algo más íntimo, individual; esto es, la desazón frente a la vida, un aburrimiento existencial. Los personajes principales van cambiando, pero no dramáticamente, sino más bien de manera sutil, como Andrei y Natalia.

Las conversaciones, cuando están por profundizar el tema, súbitamente son cambiadas de tema o tono, para ser retomadas desde otra perspectiva después, y nuevamente, cuando están por acercarse a una conclusión, vuelven a cambiar de tema o tono.
MASCHA.- En una ciudad como ésta poseer tres idiomas es un lujo inútil..., ¡ni siquiera es un lujo! ¡Un aditamento sobrante! ¡Tenemos muchos conocimientos supérfluos!
VERSCHININ.- ¡Vamos!..., ¿de manera que tienen ustedes muchos conocimientos supérfluos. […]. Poco a poco en el curso de la vida se verán ustedes obligados a ceder, a perderse en la muchedumbre de esas cien mil personas. Es probable que la vida les ahogue, pero su existencia no habrá pasado sin dejar rastro. Después de ustedes, iguales a ustedes..., habrá primero seis, luego doce, y así sucesivamente hasta que sea la gente como ustedes la que forme la mayoría […].
MASCHA (Quitándose el sombrero).- Me quedo a almorzar.
(página 30)
CHEJOV, Anton. Las tres hermanas, El jardínn de los cerezos, Tío Vania. Editorial Bruguera s.A., Barcelona, 1971. 

18 mayo 2011

El astillero

Publicada en 1961, cuenta con una pre-secuela (1964), y recién ahora en mayo 2011 he podido leerla a instancias de mi buen amigo Andrés Velarde, que desde Inglaterra no cesaba de recomendármela.

Antes había leído su cuento El infierno tan temido (primero lo había visto dramatizado por Mario Vargas Llosa en La verdad de las mentiras). Me pareció excepcional.

Me acerqué a la novela, pues, con demasiada expectativa. De la novela me gustó el manejo de las frases, largas y ricamente adjetivadas; el inicio de cada capítulo informando retrospectivamente en tercera persona plural; y, sobre todo, la conversación delirante entre Petrus y Larsen, cuando aquél se encontraba en la cárcel.

Empero el argumento no terminó de  convencerme. ¿Así por así se contrata a Larsen como gerente general? ¿Por qué Gálvez se decide a presentar la denuncia? ¿No fue muy apresurada la muerte de Larsen?

La idea general, sin embargo, me pareció atractiva. Un astillero fantasmal y vidas atravesadas por esa naturaleza.

ONETTI, Juan Carlos. Juntacadáveres. El astillero. Editorial Oveja Negra Ltda. Bogotá, 1984 (de 207 a 392)

16 mayo 2011

Casi normal

A mitad de mayo 2011 asistí al musical rock Casi normal, cuya presentación dramática, sabiamente aliviada por salpicadas dosis de humor, es una de las revelaciones del año. Como apuntó Luis Araujo en el Facebook, la actuación de Patricia de la Fuente conmueve, emociona y nos confronta.

05 abril 2011

La chalina de la esperanza

A finales de enero fui a La chalina de la esperanza, que se exponía en el centro Pancho Fierro (Municipalidad de Lima).

Rosa Cuchillo

La Universidad Federico Villareal premió esta novela en 1996, año de su publicación.